Berenice Abbott en 1929: "Atget no fue un esteta. Era una pasión dominante lo que le empujaba a registrar la vida. Con la lente maravillosa del sueño y la sorpresa, "fue" (es decir, fotografió) prácticamente todo lo que le rodeaba dentro y fuera de París, con visión de poeta. Como artista veía en abastracto, y yo creo que consiguió hacernos sentir lo que veía. Fotografiar, registrar la vida, dominar sus temas, fue tan esencial para él como lo era escribir para James Joyce o volar para Lindberg...
Se ponía en pie con el alba y, después de estudiar la luz, partía, diríase que en dirección a todas partes."
Robert Desnos en 1927: "La ciudad muere. Se dispersan sus cenizas. Pero la capital soñada que creó Atget alza sus baluartes inexpugnables bajo un cielo de gelatina. El laberinto de calles sigue su curso como un río. Y los cruces siempre se prestan a citas patéticas."
Fotografía de Atget |
Fotografía de Berenice Abbott - Retrato de Eugène Atget |