Suelo comprar los periódicos siguiendo la cadencia de los suplementos culturales*. Esta semana desordenada con las fiestas de Navidad me ha deparado una sorpresa agradable con un día de adelanto. Este viernes, día habitual de El Mundo, toca El País y el ABC. En la tercera página de Babelia, en la sección El rincón, aparece una breve reseña sobre Juan Marsé bajo una "ocupa" fotografía del autor en su estudio. Leyendo el texto de Rosa Mora, descubro una cita de Juan Marsé llena de luz:
Marsé nos dice qué es lo que hace. Y cuando no hace lo que siente que debe ser, se transforma en individuo en celo, en búsqueda de historia que contar. Y compartir.
Sale a la calle como un "Robert Walser" anónimo, errante paseante al acecho de lo inesperado que le devuelva el aroma de su esencia. Y pienso que me gustaría ser como Marsé, un individuo que es lo que hace cuando lo hace. Si Sartre proclamaba que la existencia precede a la esencia, Marsé nos instruye en la ética de un planteamiento de vida honesta y plena de satisfacciones.
* Los efectos colaterales de esta costumbre son interesantes y acostumbran al lector a ejercitar la digestión de las noticias desde planos diferentes, y muchas veces opuestos, lo que provoca un distanciamiento que estimula la producción de un criterio propio.
Fotografía de Consuelo Bautista. Juan Marsé en su estudio |